PEDRO BELTRAN: Guionista, actor y bohemio

Cuando escribía mis Entrevistas como Corresponsal, siempre tuve muy en cuenta los "tabúes" de mis entrevistados, para no espantarlos y que confiasen en mí dándome amplia información y sus secretillos.

En una entrevista a Pedro Beltrán, guionista asociado a Fernando Fernán Gómez, íntimo amigo suyo, y raro raro,,,, casi como el propio Fernán Gómez para dar entrevistas, logré que se confiase y me diese muy buenas y jugosas primicias.

Una vez entregado el trabajo en la Revista "LEAN", para la que la hice, me fui de vacaciones.

En camino a la playa me paré a comprar un ejemplar a ver cómo había salido: Me quedé de piedra, pues en el titular de presentación donde yo había puesto:

" Pedro Beltrán, un guionista de carácter", la redactora jefe de la revista ( y correctora) había puesto:

"Pedro Beltrán, CINCUENTÓN, y guionista de carácter ".

¡Madre mía, madre mía ¡, conociendo a Pedro Beltrán,,,,, con lo que me costó que confiase en mi diplomacia y buen hacer de entrevistadora,,,,,,,,,, y ahora ella ponía le de cincuentón,,,,,,,,¡ podía arder Troya.¡

No sé si llegó a leer la entrevista, pero le imagino como Fernán Gómez cuando montaba en cólera, así que llamé al Director de la Revista y le dije que le correspondía a él aguantar el chaparrón de lógico enfado de Pedro Beltrán cuando llamase para dar su opinión sobre lo de " cincuentón ", y que le pidiese disculpas y le explicara que YO no había puesto esa palabra, sino que había sido la Redactora Jefe, que se había metido donde no la llamaban.

Y es que Pedro Beltrán era un personaje algo arisco, y lograr una entrevista con él era cosa de " poner una pica en Flandes".

Yo pude coger la ocasión por los pelos, pero ya me advirtieron los que le conocían que era raro raro raro, y que a la menor, me podía dejar plantada en plena Entrevista.

Tal como me advirtieron, desplegó todo su muestrario para " asustarme y dejarme fuera de juego", pero yo conocía sus trucos ( hay que tener fuentes de información ), y no me inmuté.

Finalmente se abrió con toda la humanidad de bohemio que llevaba dentro, confiándome secretos muy jugosos, incluso dedicándome un largo poema.

Era un ser de psicología tan sensible y torturada..., que cuando viese lo de "cincuentón" imagino que quedaría impactado por esa falta de tacto........ y por eso me enfadé tanto

Desde ese momento, en mis contratos para hacer Entrevistas, explicitaba que en mis textos " no se cambiaría ni una coma" ya que lo que yo firmaba era mi responsabilidad, tanto para el éxito como para el fracaso, y así fue siempre.

Así fue como logré acceder uno de mis entrevistados más difíciles, que huía de la prensa como del demonio..... y seguro que no le faltaba razón.

Conchita Ferrando de la Lama

Publicada en Revista LEAN

Pedro Beltrán, comentarios

Por ir detrás de una idea romántica dejó un techo seguro donde dormir, en su Cartagena natal, y estuvo durmiendo “de prestado” en la Escuela de Cinematografía donde le concedieron una beca.

Con Fernando Fernán Gómez le llega la oportunidad como guionista, colaborador y amigo.

Con “ El extraño viaje”, dirigido por Fernán Gómez, inexplicablemente fracasan.

“ Creíamos que nos había caído una maldición “.

Empezó por el título, que iba a ser “ El crimen de Mazarrón” , muy al gusto de novela negra de Pedro Beltrán y de su tierra. Tuvieron que cambiarlo.

Con el nuevo título nadie valoró la película.

Ocho años de “ mal de ojo”… hasta que de repente un crítico habla de ella. Les conceden un premio en la revista especializada Fotogramas, y de ahí para delante todo parece “de otra película”.

 El éxito con ocho años de retraso.

Su colaboración con Berlanga dio títulos “Calabuch”, y después “El verdugo”, “Patrimonio Nacional”… y otros más.

Su último guión, dirigido por  Fernán Gomez, fue “Mambrú se fue a la guerra”, por el que recibió un Premio Goya en la primera edición de estos premios.

Levantino hasta la médula, como le decía su amigo Fernán Gómez.

A este personaje retraído y con cara de querer asustar para que no le importunen , le ronda por sus raíces el “trovo” popular que tanto le gustaba a su padre, y que improvisaba cuando hacían reuniones en su tierra de sierras mineras.

“ Yo creo que es el “trovo” lo que me arrastra secretamente a la poesía.”

“Me gusta tanto la poesía y la respeto tanto que no quiero escribirlas, porque al trasladarlas al papel me parece que les quita vida, las amortaja.  Yo tengo muy buena memoria y ahí están todas.

Cuando me parece, se las recito a alguien que me ofrezca confianza, o me caiga bien.”

No quisiera terminar este comentario de recuerdo a Pedro Beltrán sin agradecerle su explosión de sinceridad y su gran confianza demostrada cuando hablamos de Poesía. Algo que a ambos nos hechizaba y nos llevó a nuestro terreno favorito.

Me recitó algunos poemas, muy largos, todos de  memoria, y haciendo un extraordinario, me dejó grabar alguno en mi pequeña grabadora, como recuerdo.

Allí sigue y no pasará a papel, para que no se quede sin vida, tal como él quería.

Conchita Ferrando de la Lama

Para Revista “LEAN” de Murcia

Corresponsal