Comentario sobre el idioma español- UN ARTE-
"La Literatura (con mayúsculas) es una de las bellas artes que más despacio ha evolucionado a lo largo del tiempo". (Escritores.es)…
Precisamente por eso, por ser una de las bellas artes.
Lo inmortal, lo eterno, lo maravilloso siempre tiene un paso lento, fuerte, firme, que no permite alocamientos.
No estoy nada de acuerdo en la frase de García Márquez respecto a jubilar la ortografía, (“Jubilemos la ortografía, terror del ser humano desde la cuna: enterremos las haches rupestres, firmemos un tratado de límites entre la ge y jota, y pongamos más uso de razón en los acentos escritos, que al fin y al cabo nadie ha de leer lágrima donde diga lágrima ni confundirá revólver con revolver”) ya que esa bellísima cadencia que dan los acentos al hablar y al escribir son parte de su magia, y ese modo de pronunciar al hablar, leer o cuando el cerebro lee poniendo la voz en los acentos, la curvatura de los labios en las bes y las uves, el deslizamiento de la garganta en las ges o las jotas... todo ello hace que la lectura de un buen texto sea bueno por todo junto.
Hay un hechizo irresistible en pronunciar ciertas palabras, tal como son escritas y dichas ortográficamente correctas, y eso se perdería.
El idioma español tiene tanta carga de calado precisamente por su propio modelo como idioma, por su propio sonido, por su propio montaje de sintaxis y ortografía peculiares que ningún otro idioma ha logrado en siglos.
Creo que lo mejor es mimarlo, conservarlo, disfrutarlo, comunicarlo, leerlo, hablarlo, escribirlo, deleitarse con todos sus reflejos y sus facetas como un buen diamante tallado por un maestro en valioso brillante.
Decía la gran Carmen Conde, primera mujer Académica de la Lengua en España, que a ella le habían atrapado para ser escritora, desde muy pequeña, las palabras en sí mismas. Pronunciarlas, oír su sonido, escribirlas, investigarlas, dejarse conquistar por ellas o conquistar con ellas. Yo opino lo mismo y agradezco a Carmen Conde que me lo contase en algunas de nuestras entrevistas.
Larga vida a nuestro idioma común, envolvente, bello e intemporal.
Conchita Ferrando de la Lama ( Jaloque)
(Comentario publicado en Escritores.es)
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Se dice que Einstein relacionó cientÃficamente las matemáticas con la música y hay estudios muy sesudos que lo prueban en las grandes obras de los compositores universales.
De este mismo modo hay también una intrÃnseca relación entre la PALABRA, como sonido, y el COLOR.
El experimento se basó en una prueba con un expectrógrafo en HARVARD, que serÃa largo de explicar aqui, pero que fue capaz de pintar con colores el sonido del silbido de una locomotora de tren.
Esto se puede aplicar al valor de las palabras trasladadas a COLOR y manejarlas en esta propiedad como si fuese con pinceles de voz.
Todo nos llevarÃa a comprender que LA PALABRA, EN SI MISMA, ES ARTE.
Cuando leemos en voz alta, nuestra garganta es el instrumento musical más primitivo de la humanidad. Con él logramos sensaciones, emociones, belleza, dolor, alegrÃa, energÃa, TODO lo que el ser humano puede lograr solo con su palabra.
No lo olvidemos cuando leamos, ya sea en voz alta o con nuestra mente que también capta ese sentimiento, y no lo olvidemos cuando escribimos, cuando más correctamente más matices lograremos.
Jaloque Creaciones
#safecreative
Tienes razón Isabel. La ortografÃa. además de tener sus raÃces distintivas y su estudio semántico, tiene ese valor añadido que es el sonido en si mismo de las palabras, según están escritas. Las modulan, las hacen cadenciosas, las hacen casi música. Todo eso da valores a un idioma, lo enriquecen en el sentido de la sonoridad y le dan un hechizo especial cuando alguien las pronuncia de "esa manera".
Una vez, hablando precisamente de este poder de las palabras, alguien me dijo que se habÃa enamorado del español al oir a una persona como pronunciaba la palabra "AZUL" y que, cada vez que leÃa o escuchaba esta palabra española, le sonaba la voz y la pronunciación de esa persona. Ya veis, convirtió una sola palabra en un hechizo de amor y la unió a un sentido maravilloso. Todo eso es el poder de la palabra, tal como se escribe y se pronuncia, de modo que vamos a recordar ese poder cuando hablemos y escribamos.
Un abrazo
